Érase una vez tres perritos llamados Pin, Pan y Pun.
Pero no sabemos si son hermanos, amigos o primos.
Tienen las patas muy finas, son gorditos y cuadrados y su mirada es un poco triste.
Uno es de color amarillo, otro azul y el último rojo magenta.
Estaban tristes porque no se veían como los demás. Siempre están juntos.
Un día salieron a pasear y se encontraron con un perro normal. Pin, Pan y Pun salieron corriendo. El perro solo quería jugar. Corrieron tanto que se les rompieron las patitas. ¡No se acordaban que las tenían tan finitas!
Se cayeron y fueron a parar a una planta que se llama ortiga. Empezaron a rascarse. Se rascaron tanto que hicieron...
¡Pin, Pan, Pun! y explotaron.
FIN