Había una vez un mono muy juguetón, un día el mono estaba jugando por los árboles.
De repente el árbol donde estaba el mono se cayó al suelo y el mono se cayó por el precipicio.
El mono estaba asustado, le preguntó a todos los animales si habían visto
a su madre, pero ningún animal había visto a su madre.
Subió el precipicio y escuchó:
-¡hijo! -¿dónde estás?
Esa es mi madre.
-¡Mamá! prometo no irme solo más, dijo.
Y ya se fueron a casa juntos.
FIN